sábado, 10 de noviembre de 2007

Entre conciertos y demases

He expirado económicamente, pero no importa puedo decir que ha valido la pena. En este período del año ha ocurrido algo inusual dentro de nuestro marco musical y de eventos: un montón de grupos y cantantes muy interesantes y con trayectoria han venido por estos lares para deleitarnos con sus espectáculos, entre ellos: los de Voces Solidarias en el Estadio Nacional, como el gran Fito Páez o los Hombres g; al día siguiente, se presentó en el vértice del Museo de la Nación el genial grupo Toto (para quiénes no lo ubiquen es el de Hold the line, Africa, Rossana, etc). Y ayer fue el gran concierto de Dos pájaros de un tiro, en el Jockey. Sabina y Serrat presentaron un muy buen repertorio y el ambiente vivido fue estupendo, entre Caminante no hay camino y 19 días y 500 noches, sólo por mencionar dos de las canciones más coreadas, la noche nos mostró a dos tipos geniales, pero sencillos a la vez, que en ocasiones del evento, para pasar de una canción a otra recitaban o decían palabras en verso, e incluso cambiaron algunos vocablos de éstas, adecuándolas al contexto nacional. Simplemente grandioso!!!

Uno de los momentos más destacados de la noche fue cuando ambos intérpretes y sus músicos y coristas ofrecieron una rumba flamenca con baile incluido que fue aplaudido a rabiar por los asistentes. (RPP Noticias)

Fines de ciclo

Mediados de noviembre y mis ánimos se muestran ambivalentes, por un lado siento esmero y por otro sopor, pero éste último es más frecuente. La vida en facultad es distinta pero también interesante, el pabellón "E" tiene algo especial, de alguna forma le estoy tomando bastante feeling a la Universidad y más particularmente a mi facultad, me gusta demasiado caminar por esos pasadizos llenos de fotos, de imágenes, de textos; o llegar un lunes y ver que van a proyectar durante la semana en la Ventana Indiscreta. Me gusta subir por ese ascensor peculiar que tenemos y ver cómo alguien filma algún trabajo o toma fotos. Me gusta ir a la cabañita y que Marcela, la srta que atiende, ya sepa lo que voy a pedir y me diga de frente sin preguntar : ¿un café con leche? y yo asienta mientras espero el brevaje.
A estas alturas ya muchas caras se me hacen conocidas, de algunas forma se van creando vínculos y se llega a un momento en que en un grupo todos se conozcan, aunque sea de vista. Si no se sabe de qué hablar, uno de los puntos usualmente más tocados tienen relación a algún curso o profesor.
Estas últimas semanas están plagadas de trabajos y exposiciones, el estrés se asoma de nuevo, pero el hecho bueno es que la gran mayoría son acerca de asuntos interesantes, así que de alguna forma eso incentiva a realizar un buen ensayo, creo que en eso radica la importancia de estudiar algo que a uno le guste y con lo cual se sienta identificado, en mi caso, este hecho se manifiesta en la clase de Fundamentos de Marketing, sé que éste es de vital importancia para la formación de todo comunicador pero no me atrae mucho, no es la profesora, es sólo que mi predisposición hacia ese curso no es profunda, no sé por qué será. En cierta forma ya quiero acabar el ciclo, me siento cansada, no obstante, tampoco no quiero adelantar todo el tiempo que queda y no disfrutar de cada momento, de alguna broma, de un gesto, de la compañía de una persona, etc.